Firefox

Rss

1 Juan 4:8

“El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor”.


Cuando experimentamos alguna tragedia o pérdida, no podemos entender como algo bueno puede salir de eso. Tal vez tengamos dificultad imaginandonos que alguna vez volveremos a ser felices. Y aunque la promesa es que “Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito” (Romanos 8:28), en una situación desastrosa nos preguntamos, ¿Cómo puede ser posible que Dios saque algo bueno de esto?. La verdad es que Él lo puede hacer sin importar lo mala que sea la situación. Sólo Él sabe como lo hace. Pero no sucede en forma automática, tenemos que cumplir ciertas condiciones.

En primer lugar, debemos amar a Dios. Si no lo amamos, o estamos enojadas con Él, y tenemos ira, resentimiento, amargura, falta de perdón o una actitud de odio, esta promesa no se cumplirá. La Biblia no dice que Dios dispone para bien todas las cosas de aquellos que niegan Su existencia hasta que ocurre algún desastre y luego corren a Él y le demandan que arregle todo lo que está mal. Dios sabe lo que hay en Nuestro Corazón, y no podemos ocultarle nada. Él dispone todas las cosas para bien de los que le aman, y él sabe si en realidad le amamos o no.

Amar a Dios no quiere decir que oramos simplemente cuando queremos algo, tratándolo como si fuera un Papá Noel espiritual o alguien que nos provee todas las cosas. Él quiere que le pidamos las cosas de acuerdo a Su Voluntad. De hecho, Dios dice que no tenemos ciertas bendiciones porque sencillamente no se las pedimos (Santiago 4:2). Pero Él quiere que lo amemos de tal manera que le pidamos lo que Él quiere en lugar de solo decirle lo que nosotros queremos. En otras palabras, no podemos pasar por alto Sus Leyes o rechazar Sus caminos y luego correr a Él y demanadar que nos de todas las cosas que deseamos tener. Eso no es amar a Dios.

Amar a Dios es una forma de Vida que no depende de las circunstancias. Depende de conocer a Dios. Cuando en realidad lo conocemos, lo amamos. Amar a Dios quiere decir confiar en Él con todo nuestro corazón y caminar con Él cada día sin importar lo dificil que pueda ser. Significa saber que Dios siempre está de nuestra parte aún si no sentimos Su Presencia en el momento. Quiere decir que oremos con la guía de Su Espiritu Santo y rehusarnos a sentir temor y a dudar.

En segundo lugar, amar a Dios quiere decir, Amar a Otros. Quiere decir orar por esas personas y pedirle a Dios que le muestre maneras en que puede ayudarlas cuando pasen por situaciones dificiles. Es dar palabras de esperanza, consuelo y seguridad, afirmando que Dios las ama y que no las ha olvidado. Nada nos ayuda a pasar por tiempos de dificultad con más éxito que mostrarle el amor de Dios a Otros.

Recuerde siempre que no importa que su mundo se sacuda, Dios es inamovible. Así que no deje de confiar en Dios cuando atraviesa tiempos dificiles. Continúe demostrando su amor por Él, alabandolo por Quien es y por todas las cosas que ha hecho. Y déle gracias por anticipado por las cosas buenas que pronto traerá de esa situación.

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28).

Autora: Lidia Tapisquen
Escrito para: http://blog.vivoparacristo.info/

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dedicar un momento de tu tiempo para Comentar este tema.

Los comentarios ANONIMOS NO serán aprobados.