“Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias”.
Estoy seguro que encontrarnos con Jesús ha sido la experiencia mas maravillosa de nuestras vidas, de hecho esa experiencia vino a cambiar la perspectiva nuestra y nos permitió ser perdonados de nuestros pecados.
¿Cómo no recordar ese hermoso momento?, cada vez que traigo a memoria el encuentro que tuve con Cristo me dan ganas de llorar, mi vida se estremece y mi corazón se sensibiliza, es que no hay duda que nuestro corazón se rindió a los pies de Jesús en ese día maravilloso. Es ahí en donde el Apóstol Pablo escribiendo a los Colosenses menciona el hecho de haber recibido al Señor y dice: “de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él”, traduciendo al lenguaje popular mío seria: “Así con el amor y disposición de corazón que recibiste al Señor, así también trata de amar al Señor y disponer tu corazón para caminar con forme a su voluntad”.
Este es un buen día para reflexionar acerca de mi andar en el Señor, puesto que la voluntad de Dios al llamarnos era edificarnos en amor para que abundáramos en acciones de gracias como lo dice el versículo siete de este capitulo.
Dios quiere que abundemos en acciones de gracias, no para salvarnos, pues ya somos salvos al entregar nuestra vida a Jesús y vivir cada día para El. Ahora hacemos las obras no para salvarnos, sino por demostrar nuestro agradecimiento al Señor.
La única manera de agradar a Dios es, andando en El, ¿Lo estas haciendo?
Tomado de: Reflexiones y Devocionales